Subir a bordo al MOB es el último paso, y en muchas ocasiones es el más complicado. En la entrada analizaremos varias alternativas para subir a bordo a un MOB.

En artículos anteriores hemos visto la importancia de la localización y del acercamiento. Ya sólo queda aproximar al MOB al barco e izarlo a bordo. Distinguiremos entre estas dos maniobras de la fase final porque si bien algunos métodos o técnicas aportan una solución a ambas, hay otros específicos para aproximar al MOB a la borda, o bien subir a bordo al MOB.

Metros finales

Hemos sido capaces de localizar al MOB y acercarnos a él. Ahora lo tenemos a escasos metros. A poco viento y mar que tengamos, no conviene pegarse totalmente al MOB en la maniobra de acercamiento ya que le podemos golpear o incluso dañar con la hélice si estamos maniobrando a motor.

Es preferible situarnos a barlovento y lanzarle un cabo flotante con un objeto también flotante al que se pueda agarrar, idealmente con forma de gaza. Si se lo puede pasar alrededor del cuerpo, puede ayudar en la fase de izado.

Lanzamiento al MOB de sistema de gaza flotante
Lanzamiento al MOB de sistema de gaza flotante

En cualquier caso, hay que tener en cuenta que para el MOB, el mero hecho de sujetarse y ser arrastrado puede suponer un gran esfuerzo. Hay que hacer la maniobra muy despacio para evitar que el MOB trague agua.

Subir a bordo al MOB

Idealmente trataremos de subir a bordo al MOB por el costado de sotavento, aunque si hay mucha mar puede ser conveniente hacerlo por la banda de barlovento para evitar el riesgo de que el casco golpee al MOB. Nunca intentaremos recoger al MOB por la popa, tratando de aprovechar escaleras o plataformas de baño. Con ola de poco más de medio metro, la caída de la popa sobre el MOB puede tener consecuencias fatales. Si no queda más remedio, tendremos que estar muy seguros de lo que hacemos para intentar la recogida del MOB por la popa.

Algunas de las opciones que tenemos para subir a bordo al MOB son:

  • Escalas

Es una gran opción si el MOB tiene fuerzas para asirse y subir los peldaños. La gran ventaja es el ahorro de tiempo frente a otras soluciones. Y cuanto menos tiempo permanezca el MOB en aguas frías, más fuerzas tendrá y más sencillo será el rescate.

Escala de rescate MOB
Escala de rescate MOB

El inconveniente es que no es fácil subir por una escala. Al igual que con el resto de técnicas, hay que entrenar en condiciones favorables. Si no lo hacemos, en caso de necesidad será sólo una casualidad la que nos permita ejecutar bien la acción de subir a bordo.

En este video (en inglés) se puede ver un interesante ejercicio de subida de un MOB por una escala (y del riesgo de las líneas de vida demasiado largas)

  • Lonas o superficies que envuelven al MOB

En su versión más sencilla es una simple vela de proa engarruchada, a la que hemos liberado del estay unos cuantos garruchos intermedios (mantendremos como mínimo el puño de amura y algunos próximos al puño del grátil). La echamos por la borda para que la bolsa llegue al agua con objeto que el MOB se pueda introducir en el seno formado. Tirando de la driza del foque con un winche el MOB iría subiendo hasta la cubierta.

Hay soluciones comerciales más elaboradas, basadas en el mismo principio. La ventaja es que son rápidas de poner en marcha. Por contra, no es fácil para el MOB introducirse en el seno de la superficie de izado, y al tratar de subirlo pudiera estar con la cabeza hacia abajo con el riesgo de tragar agua si hay oleaje considerable.

Cuna para subir a bordo al MOB
Cuna para subir a bordo al MOB
  • Usar la anilla de izado

A priori es la más obvia. Todos sabemos que existe una anilla en forma de D en el arnés o chaleco, así que inmediatamente pensamos en alguna forma de enganchar un cabo a la anilla del que poder tirar e izar al naufrago.

Es muy común utilizar una driza (idealmente la del spinnaker cuya polea en el palo tiene más juego) con algún tipo de mosquetón en su extremo para facilitar el enganche a la anilla. El otro extremo irá a un winche de un tamaño suficiente para ayudarnos en la maniobra de izado.

En ocasiones se emplea la botavara y el sistema de poleas de la escota de la mayor, aunque es un sistema más lento de montar que el de la driza. Presenta además el inconveniente que en los barcos con contra rígida, al no poder elevar la botavara nos va a costar poder izar al MOB a una altura adecuada para meterlo en cubierta sin tener que liberar los guardamancebos.

Una tercera opción muy conveniente es dejar fijada en un obenque, a una altura razonable para poder alcanzarla sin hacer malabarismos, una anilla o gaza de cabo de la que colgar un sistema de poleas similar al de la escota de la mayor, pero específico para este fin (es decir, de la longitud adecuada, y de fácil colocación con mosquetones en sus extremos). También lo podemos hacer usando una driza. En este caso no será necesario trabajar sobre la driza, ya que el izado lo haremos con el mecanismo desmultiplicador de poleas.

Sistema de poleas sobre una driza para izado del MOB
Sistema de poleas sobre una driza

La principal desventaja de este sistema de izado a la anilla del chaleco es que no es extraño que el MOB con el chaleco hinchado, alterado y cansado, no sea capaz de encontrar la anilla de izado. Su ventaja, como ya hemos dicho anteriormente, es que es muy intuitivo y no es complejo de montar.

  • Utilizar una gaza alrededor del cuerpo y bajo los brazos

Este sistema trata de paliar la complicación que hemos comentado en el punto anterior: que el MOB no pueda localizar la anilla de izado. Bastará con que se introduzca en la gaza flotante y la sitúe alrededor de su cuerpo por debajo de sus brazos.

A continuación procede aplicar alguna técnica de izado de las comentadas en el punto anterior.

Su principal inconveniente es que tampoco es sencillo pasar el cuerpo alrededor de la gaza, ya que no son demasiado amplias para que el MOB no se pueda deslizar durante el izado.

En cualquier caso, es de los mejores sistemas que existen, ya que con un equipo simple cumple el doble objetivo de posibilitar aproximar al MOB e izarlo.

Subir a bordo al MOB con gaza flotante
Subir a bordo al MOB con gaza flotante
  • Usar el auxiliar como paso intermedio

La mayoría de las soluciones en el mercado parten de la premisa de que el MOB puede ayudar en la maniobra. La realidad es que el MOB en mar abierto y en condiciones moderadas de viento y mar va a estar bastante limitado, si no anulado si a viento y mar le sumamos una temperatura del agua por debajo de los 20 grados, y tardamos más de 10 minutos en recogerlo.

Si el MOB está agotado y no puede colaborar en la maniobra de subir a bordo una opción es arriar el bote auxiliar con una persona a bordo (sujetos ambos al barco) que pueda subir a bordo de este al MOB. En una segunda etapa y ya en una situación un poco más favorable se izaría al MOB al barco desde el auxiliar utilizando alguno de los métodos vistos que usan la anilla de izado.

El inconveniente claro de esta maniobra es que no es trivial arriar el bote con mal tiempo y situar un tripulante a bordo. Y además hacerlo en el momento adecuado, una vez aproximados al MOB. Con viento y mar de cierta consideración, la situación relativa de barco y MOB cambia muy rápido y nos podemos ver en una situación complicada donde el MOB se aleja y ya tenemos arriado el bote y con un tripulante a bordo, limitando la maniobra del barco.

La ventaja sin duda es que en embarcaciones con bastante francobordo puede ser de las pocas opciones factibles para recuperar a un MOB que no puede colaborar en su rescate.

Recuperación del MOB desde el bote auxiliar
Recuperación del MOB desde el bote auxiliar

Esta maniobra se puede hacer también sin el bote auxiliar, situando a un tripulante en el agua convenientemente equipado (por ejemplo con un traje seco o de supervivencia), siempre unido al barco con un cabo que nos permita izarlo con rapidez, para que asista al MOB en el izado. Esta variante es una maniobra a sopesar mucho, ya que de partida tendremos a 2 MOB en lugar de uno.

Conclusiones

El acercamiento en los últimos metros y su posterior izado es la fase final de un episodio de MOB. No hay que subestimar esta etapa porque las fuerzas del MOB estarán al límite y el izado no es una tarea sencilla.

Existen muchas técnicas para subir a bordo al MOB. Lo más recomendable es elegir un par de ellas con las que nos sintamos cómodos y entrenarlas frecuentemente.

No tenemos excusa para tener el material bien mantenido y en un lugar de fácil acceso, y como mínimo hacer simulacros para preparar el material y estar listos para el izado. No es algo que sólo deba conocer el patrón de la embarcación, ya que él también puede ser el MOB. Sin duda agradeceremos este entrenamiento si algún día tenemos la mala suerte de tener un MOB.