Aparejo de Fortuna nace de la necesidad de escribir que en ocasiones padecen los lectores compulsivos. Pero también nace con la vocación de restituir. Tras muchos años de consumir información en internet que otros se tomaron la molestia de escribir, uno siente que debe contribuir de alguna forma a continuar con esa buena costumbre.

No podía ser de otra forma que escribiera sobre los barcos y sobre el mar, una de mis grandes pasiones, y en concreto sobre la seguridad y las emergencias en la náutica de recreo. Aprendí a navegar en una escuela donde la seguridad era la piedra angular sobre la que se construía la pasión por el mar y la navegación. Las millas navegadas se encargaron de enseñarme que más allá de la seguridad empieza la emergencia. Y de seguridad y emergencias en la mar trata este cuaderno de bitácora.

No esperéis recetas mágicas, nada sustituye a la experiencia cuando hablamos de navegar. Las entradas responden a una visión personal de temas que se cuelan en mi cabeza sin un criterio o lógica preestablecida, sin ánimo de sentar cátedra, cuan arreglo improvisado en plena navegación. Intentaré aportar otra visión o buscar un contrapunto que enriquezca un debate. A través de la sencillez y el pragmatismo, y con la humildad del aprendiz que siempre seré en cuestiones del mar, daré por bueno cada minuto empleado en escribir este cuaderno si por un segundo no te dejo indiferente.

Luis Hernández