La radio SSB marítima sigue ocupando un lugar relevante en las travesías de altura. Si bien es una tecnología en retroceso, es un elemento más de seguridad que debemos conocer y dominar.

La radio SSB marina junto con las comunicaciones satelitales permiten las comunicaciones a larga distancia en el entorno marino. Ya hablamos un poco de ellas en una entrada anterior. Antes de entrar en detalle, es bueno zanjar una cuestión cada vez más frecuente.

¿Radio SSB o comunicación satelital?

Hay muchas líneas escritas en los foros náuticos sobre esta cuestión. Hay defensores y detractores (diría que acérrimos) de cada tecnología.

Pero la cuestión de fondo hay que abordarla desde el pragmatismo, que guía a cualquier navegante frecuente ante la decisión de llevar un «trasto» más a bordo: qué me aporta frente a lo que me cuesta (adquirir y mantener) y a lo que me ocupa.

¿Carta náutica vs. plotter?¿AIS vs. radar? ¿dos anclas o tres? y así podríamos enumerar casi infinitos ejemplos. En algunos casos son nuevas tecnologías que superan a las anteriores, en otros casos son simplemente repuestos del mismo tipo.

La realidad es que desde el punto de vista estricto de la seguridad la tecnología satelital ofrece prestaciones muy superiores y a un coste similar que la radio SSB. Y a medida que se vaya popularizando, sus costes se irán reduciendo y sus funcionalidades creciendo.

Pero ¿a quién no le gusta tener un plan B? Por este motivo, mi recomendación a día de hoy es contar con ambas tecnologías si nuestro bolsillo nos lo permite.

Mi objetivo en esta entrada es desmitificar la complejidad que se achaca a la radio SSB marítima. Es un magnífico plan B que en algunos programas de navegación como la de altura aporta mucho más de lo que cuesta.

Elementos clave de la radio SSB marítima

No es el objetivo de la entrada profundizar en cada uno de los componentes de un sistema de emisión/recepción en HF ya que cada componente en sí mismo podría ocupar un libro. Intentaré evitar entrar en tecnicismos lo máximo posible a costa de perder un poco de rigor en la explicación (que me perdonen los puristas) porque mi objetivo es que cualquiera pueda entender y mantener un sistema de seguridad en las embarcaciones de recreo.

Los componentes fundamentales de un sistema de comunicaciones basado en SSB los podemos ver en la siguiente imagen (diagrama original de Sailboat Cruising)

Esquema básico de componentes de un sistema de radio SSB marítima

La radio

Es el elemento que nos permite convertir la voz en una señal eléctrica y viceversa. Es evidentemente una definición extremadamente simplificada. Pero es la esencia de un transceptor.

Si una persona está transmitiendo en un canal (=frecuencia), para que exista comunicación el receptor debe estar escuchando en el mismo canal (=frecuencia). Una radio buena será capaz de convertir nuestra voz a una señal eléctrica con la frecuencia exacta que le estamos pidiendo, no a otra parecida. Y será capaz de detectar señales eléctricas de la frecuencia exacta que le estamos pidiendo para convertirlas en voz.

A partir de aquí podemos complicar todo lo que queramos una radio, con todas las funcionalidades que nos podamos imaginar. Pero lógicamente el precio del equipo irá creciendo acorde. Y para un plan B en materia de seguridad, debemos mirar con lupa el presupuesto que invertiremos.

Hay mucho debate si la radio debe estar marinizada o es suficiente con una concebida para uso terrestre. Desde el punto de vista estrictamente técnico, cualquiera de las 2 cumplirá su misión a la perfección. Ahora bien, hay 2 consideraciones relevantes a tener en cuenta:

  • El ambiente salino y la electrónica no son los mejores amigos. Un diseño específico para proteger los componentes del equipo alargará su vida (podríamos debatir ampliamente si la diferencia de precio compensa la durabilidad …)
  • En muchos paises hay legislación al respecto, y no se permite emitir a menos que el equipo tenga una precisión concreta en la frecuencia de la señal generada. Normalmente la radio diseñada para uso marítimo genera una señal con una frecuencia muy precisa.

La antena

La antena se encarga de convertir una señal eléctrica en una onda electromagnética que viaja por el aire. Y lo contrario también suele ser cierto: convierte una señal electromagnética en una señal eléctrica.

Muchas veces se menosprecia la importancia de la antena en relación a la radio. Nos gastamos la mayor parte del presupuesto en una «buena» radio, y lo poco que nos queda sirve para apañar una antena. Tremendo error.

Una mala radio transmite y recibe decentemente con una buena antena. Sin embargo, la mejor radio no sirve para nada con una antena mediocre.

Esto es así porque la atmósfera terrestre, que es el medio de transmisión para las ondas de radio, atenúa enormemente las ondas. Podemos visualizarlo lanzando una piedra a una superficie de agua calmada. En relativamente pocos metros la onda generada es imperceptible.

Sin una antena que saque el máximo partido a la energía de la señal que le entrega la radio para radiarla a la atmósfera, no habrá posibilidad de recepción. Y también la antena deberá ser magnífica escuchando señales normalmente muy débiles procedentes de cientos o miles de kilómetros.

En el diagrama superior la antena se ha implementado utilizando parte del backstay. La parte inferior siempre se aísla para que nadie se pueda agarrar y sufrir una quemadura si la radio está transmitiendo. También es común utilizar antenas telescópicas o tipo látigo flexibles (7 metros de longitud).

Catamarán con antena telescópica o de tipo látigo montada en la popa
Antena SSB en backstay aislado … quizá hay que aislar más tramo del backstay

Sin complicar demasiado el asunto, diré que la naturaleza es muy caprichosa y una antena perfecta para una frecuencia puede ser terriblemente mala para otra frecuencia distinta. Para la banda de frecuencias comunes en radio marítima SSB se suelen utilizar antenas multibanda tipo dipolo, en las que se sustituye una parte del dipolo por la contraantena. Un ejemplo son los 2 tipos descritos anteriormente.

El acoplador de antena

Lo complicado de la radio SSB marítima es que queremos transmitir/recibir en un conjunto amplio de canales o frecuencias. Si sólo usáramos una frecuencia, construiríamos la antena ideal y ya tendríamos optimizado el sistema.

Es por ello que se busca un compromiso en el diseño de las antenas para que sean suficientemente buenas para el rango de frecuencias en las que queremos transmitir/recibir (antenas multibanda)

Aún así es necesario un elemento que es el acoplador de antena, que «hace creer» a la señal eléctrica generada por la radio que la antena es idónea para «saltar» a la atmósfera como onda electromagnética. Si no fuera por el acoplador, la señal se daría la vuelta (se reflejaría) al llegar a la antena y volvería hacia la radio pudiendo estropearla.

Después de una buena antena, un acoplador es el siguiente elemento en importancia. Sin un buen acoplador, no llegará señal a la antena. Y la mejor radio del mundo volverá a ser inútil.

Acoplador modelo SG230

Pero la radio no es el tercer elemento en importancia. Hay todavía otro más importante.

La contraantena

Las ondas de radio emitidas/recibidas por nuestra antena se van a reflejar en las superficies que la rodean. Estas ondas reflejadas pueden potenciar nuestra transmisión/recepción o por contra la pueden debilitar.

Una analogía común para entender cómo funciona la contraantena es las tabla que usa un saltador como trampolín para hacer más potente su salto. Sin un buen diseño de contraantena, el alcance se verá reducido drásticamente.

Las propiedades eléctricas del agua salada hacen que el mar sea una magnífica contraantena. Si nuestro barco tiene el casco metálico ya tenemos el problema resuelto. Si nuestro casco es de fibra o de madera bastará que hagamos una conexión eficiente con el agua del mar como veremos en el siguiente apartado.

Aspectos fundamentales de la instalación de una radio SSB marítima

Una vez descritos los principales componentes, «tan solo» queda conectarlos bien entre ellos para que funcionen efectivamente como un sistema. Ni más ni menos.

Pero hay que seguir ciertas reglas. Recordemos que la radio convierte nuestra voz en una señal de radiofrecuencia adecuada para ser transmitida por el aire (y viceversa). Esta señal de radiofrecuencia tiene que alcanzar la antena.

Para transmitir la energía de un elemento a otro del sistema de radio SSB utilizaremos conductores especiales. A diferencia de la corriente contínua, la radiofrecuencia (que no deja de ser un tipo de corriente alterna) se transmite mejor utilizando unos conductores especiales que se conocen como líneas de transmisión. Ejemplos de líneas de transmisión para radiofrecuencia son el cable coaxial, el cable bifilar o las líneas planas tipo strip.

1.Conexión de la radio con el acoplador

Normalmente se usa un cable coaxial y, dependiendo del tipo de acoplador, puede hacer falta o no un cable adicional de control.

Es importante que además de un cable coaxial de buena calidad, vigilemos que la conexión del cable con el conector, que suele ser del tipo PL-259 está bien hecha. Esta línea de transmisión va a soportar potencias típicamente del orden de 150 watios o superiores.

2.Conexión del acoplador con la antena

Hay que tener mucho cuidado con este tramo de la conexión del sistema de radio. Como he mencionado anteriormente, estamos hablando de una potencia de radiofrecuencia transmitida considerable. Si tocamos un cable que transmite esta potencia, como mínimo vamos a sufrir quemaduras de consideración.

Por otra parte, la antena comienza a la salida del acoplador de antena. Pero en una embarcación es muy difícil que la antena se conecte directamente al acoplador. Vamos a necesitar un cable que conecte ambos elementos y nos interesa perder la mínima cantidad de señal posible. Necesariamente debe ser un cable corto.

Teniendo en cuenta ambos requisitos, se suele emplear cable capaz de trabajar con voltajes elevados y al mismo tiempo que tenga un gran aislante alrededor.

Un buen ejemplo son los cables planos de cobre trenzados que se utilizan por ejemplo en automoción. Deben estar protegidos con cinta aislante especial para alto voltaje. Al estar en el exterior, si la cinta tiene tratamiento ultravioleta durará más tiempo. Y si el cobre está estañado, resistirá mejor el efecto de la corrosión.

Cable plano de cobre trenzado

También podemos utilizar cables específicos para alta tensión cilíndricos, que ya disponen del aislante adecuado, aunque presentarán mayor resistencia y por tanto se transmitirá menos señal a través de la antena. En concreto el GTO-15 es muy utilizado para la conexión del acoplador con la antena en Norteamérica.

Conductores cilíndricos para tensiones elevadas

3.Conexión del acoplador con la contraantena

Hay muchísima literatura escrita sobre este tema. Gran parte de ella se basa en las experiencias reales de muchos navegantes. El diseño de la contraantena así como la conexión con la misma es un punto que desconcierta habitualmente a los que no son expertos en la materia, y hace que un buen número de ellos piense que esto de la radio SSB es algo complejo y difícil.

Es importante entender el concepto de eficiencia en lo que se refiere a un sistema de transmisión/recepción. Si transmitimos con una potencia de 150 watios, pero a la antena sólo llegan 10 watios quizá nos oigan muy lejos pero la transmisión es de todo menos eficiente. Pero tampoco debemos caer en el error de intentar diseñar un sistema cuasi-perfecto porque es difícil.

El mejor compromiso se obtiene utilizando el mar como contraantena, y simplemente conduciendo la señal de radiofrecuencia hasta el agua. Una buena solución es utilizar como conductor una tira plana de cobre desde el acoplador:

  1. Hasta el agua directamente
  2. A través de un pasacascos de bronce que esté en contacto permanente con el agua
  3. A través de una placa de bronce específicamente diseñada para este fin, fijada a la parte inferior del casco
Placa porosa de la marca Dynaplate
Conexión del acoplador con la contraantena (mar) – conductor de cobre plano y placa porosa bajo el casco

4.Conexión de la radio con la contraantena

Por último, necesitamos una conexión a tierra para nuestra radio. En el caso del entorno marítimo utilizaremos el mar como potencial de referencia.

Las alternativas son las mismas que en el caso de la conexión del acoplador a la contraantena. Por ejemplo, si tenemos instalada una placa porosa, podemos aprovecharla también para conectar mediante una tira plana de cobre la salida de tierra del transceptor o radio hasta la placa, que constituirá un camino directo al mar.

¿Instalar nosotros la radio SSB?

Mi consejo es que salvo que seamos «manitas» en temas de radio, lo deleguemos en expertos. Una buena instalación es clave para obtener una transmisión y recepción de calidad.

En cualquier caso, recomiendo estar presente durante la instalación. Teniendo claros los conceptos que hemos revisado, aprenderemos mucho y seremos capaces de proporcionar un mantenimiento adecuado al sistema. De otro modo, será un oscuro misterio que no entenderemos. Un fallo menor (como los que veremos a continuación) inutilizará un sistema de seguridad.

Mantenimiento de una radio SSB marítima

A. Fallos en la electrónica

Si se produce un fallo en un sistema electrónico, como puede ser el acoplador o la propia radio no nos va a quedar otro remedio que llevarlos al servicio posventa correspondiente del fabricante.

Por suerte no son sistemas que fallen frecuentemente. Básicamente hay que evitar:

  • Descargas eléctricas -> es muy recomendable desconectar tanto la radio como el acoplador de la antena en caso de tormentas eléctricas. No es necesario que nos caiga un rayo encima para que se estropee la electrónica de abordo. Basta con que caiga en un lugar próximo. Esto es aplicable al resto de la electrónica que está conectada a algún tipo de antena (por ejemplo el AIS, radar, plotter, etc.)
  • Golpes -> fundamentalmente en el acoplador, que en algunos casos y por la necesidad de estar próximo a la antena, va ubicado en lugares donde almacenamos otros materiales. Debemos vigilar la estiba de estos materiales para que no golpeen al acoplador con el movimiento del barco.

B. Fallos en las conexiones

Aquí es donde se producen la mayor parte de los fallos y estos sí los podemos evitar o, una vez producidos, subsanar.

Aunque ya lo he comentado anteriormente, cualquier trabajo de mantenimiento debe hacerse con la alimentación de la radio desconectada, y evitando días con actividad eléctrica en la atmósfera. Una quemadura por radiofrecuencia es muy desagradable. Y una descarga de un rayo, letal.

  • Limpieza de pasacascos y placas porosas -> si los utilizamos como vía directa para la tierra de la radio o para utilizar el mar como contraantena tienen que estar en buenas condiciones. Es aconsejable revisar y limpiar cada 3 meses.
  • Conexiones -> este es sin duda el punto más importante a tener en cuenta. El ambiente salino ataca a las conexiones eléctricas. En el proceso de instalación utilizaremos sprays o pinturas impermeabilizantes que alargarán la vida de las conexiones. Cuando proceda utilizaremos material termoretráctil o recauchutable para cubrir los empalmes. Deberemos revisar periódicamente el estado de las conexiones, y rehacerlas sin esperar a que fallen si muestran signos de deterioro.

Conclusiones

La radio SSB marítima es de gran utilidad para los programas de navegación de altura. Pero más allá de la utilidad es todavía a día de hoy una pieza importante para la seguridad en este tipo de navegaciones.

El conocimiento de un sistema de nuestro barco servirá para que incorporemos su mantenimiento en la lista de tareas rutinarias que hay que llevar a cabo periódicamente para funcione correctamente.

En esta entrada he tratado de dar una visión simplificada pero a la vez suficiente de un sistema de radio SSB marítima. Espero que os haya resultado interesante, que aporte criterio a la hora de decidir si necesitamos uno, y que desmitifique la complejidad que se les achaca.